20 de febrero de 2007
Llegada al garaje de una nueva moto. O algo que se le parece, según la familia. Y tienen razón. Es un trasto infecto, sucio, oxidado, maloliente y, a simple vista, irrecuperable.
Comprobando el número de chasis, veremos que estamos hablando de una auténtica y genuina Moto Guzzi 850 LeMans (mal llamada LeMans I para no confundirla con posteriores versiones II, III... etc), de la 2ª serie, matriculada el 19 de agosto de 1.978 y con matrícula de Girona (bueno, en la placa pone aún GE).
Pero todo es susceptible de empeorar y la vista por el lado izquierdo es aún más descorazonadora, con un cilindro absolutamente desmontado.A parte de esto, parece que la moto está bastante entera (aunque le falta la pantalla, lleva el cupolino original), el freno delantero funciona, y el combinado no. El cilindro desmontado (sinistro) no se ve rayado, pero la culata está hasta los topes de carbonilla. Además el conducto de escape está hasta los topes de óxido de aluminio.
Los silenciadores están completamente oxidados y podridos en su parte inferior, pero los colectores parecen estar correctos.
Y muchas más cosas que van a ir apareciendo durante el desmontaje. Seguro.



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